jueves, 31 de octubre de 2013

Consecuencias de la rebelión en nuestro mundo

 Las consecuencias personales del rechazo intencional y persistente de la luz por parte de la criatura son individuales y únicamente les atañen a la Deidad y a aquella criatura personal. Tal cosecha de iniquidad, que destruye el alma, es el fruto interno de la criatura volitiva inicua. Pero éste no es el caso en lo que concierne las repercusiones externas del pecado: Las consecuencias impersonales de abrazar al pecado son tanto inevitables como colectivas y le atañen a toda criatura que funcione dentro del ámbito afectado por tales acontecimientos.50.000 años después del fracaso de la rebelión, estaban tan desorganizados y retrasados los asuntos terrenales que había avanzado muy poco la raza humana más allá del estado general de evolución que existía al llegar Caligastia 350.000 años antes.Los efectos del pecado nunca son puramente locales. El pecado está destinado a exhibir su cosecha negativista puesto que es una actitud de la persona hacia la realidad. Pero las consecuencias plenas del pensar erróneo, la fechoría, o los designios pecaminosos se sienten únicamente en el nivel de la ejecución misma. La transgresión de la ley universal puede ser fatal en el ámbito físico sin implicar gravemente a la mente o sin menoscabar la experiencia espiritual. El pecado está cargado de consecuencias fatales para la supervivencia de la personalidad sólo cuando es la actitud de todo el ser, cuando representa la elección de la mente y la volición del alma.La maldad y el pecado visitan sus consecuencias en ámbitos materiales y sociales y a veces hasta pueden retardar el progreso espiritual en ciertos niveles de la realidad en el universo; pero jamás el pecado de ningún ser le roba a otro la realización del derecho divino de la supervivencia de la personalidad. La supervivencia eterna puede peligrar sólo por las decisiones de la mente y la elección del alma del individuo mismo                             Tomado del L.U.

martes, 29 de octubre de 2013

El estallido de la rebelión en nuestro mundo

Después de la inspección de Satanás, cuando la administración planetaria estaba en vísperas de realizar algo grande en nuestro mundo,un día Caligastia sostuvo una prolongada conferencia con su asociado Daligastia, después de la cual este último convocó a los diez consejeros a una sesión extraordinaria. Esta asamblea se inauguró declarando que el Príncipe Caligastia estaba a punto de proclamarse soberano absoluto de este mundo y que exigía que todos los grupos administrativos abdicasen, cediendo todas sus funciones y competencias a Daligastia en su calidad de fideicomisario, hasta tanto que se reorganizara el gobierno planetario y, posteriormente se redistribuyeran estos cargos de autoridad administrativa.La presentación de esta sorprendente exigencia fue seguida por el discurso magistral de Van, presidente del consejo supremo de coordinación. Este ilustre administrador y capaz jurista tildó el proceder propuesto por Caligastia de acto que rayaba en la rebelión planetaria y exhortó a los presentes a abstenerse de toda participación hasta tanto se pudiera presentar un recurso de apelación ante Lucifer, el Soberano del Sistema; y se granjeó el apoyo de todo el séquito.Se interpuso apelación en Jerusem y llegaron sin tardanza las órdenes de Lucifer que designaban a Caligastia como soberano supremo y que exigían absoluta e incondicional lealtad a sus mandatos. A esta sorprendente comunicación el noble Van contestó con su memorable alocución que duró siete horas, en que acusó oficialmente a Daligastia, Caligastia y Lucifer de desacato a la soberanía del universo de Nebadon; y apeló a los Altísimos de Edentia para su apoyo y confirmación.Entretanto, se habían cortado los circuitos del sistema;nuestro mundo quedó aislado. Todos los grupos de vida celestial en el planeta, de repente y sin aviso, se hallaron aislados, totalmente incomunicados de asesoría y consejos exteriores.

lunes, 28 de octubre de 2013

La traición de Caligastia en nuestro mundo

Los problemas relacionados con nuestra existencia humana son imposibles de comprender sin conocer ciertas grandes épocas del pasado,señaladamente, el caso y las consecuencias de la rebelión planetaria. Aunque esta sublevación no estorbó gravemente el progreso de la evolución orgánica en éste mundo, sí modificó marcadamente el curso de la evolución social y del desarrollo espiritual. Esta calamidad devastadora influyó profundamente en toda la historia superfísica del planeta.
Llevaba Caligastia trescientos mil años a cargo cuando Satanás, el asistente de Lucifer, hizo una de sus visitas periódicas de inspección. Al llegar Satanás,su aspecto no se parecía de ninguna manera a nuestras caricaturas de su majestad nefaria. Era, y sigue siendo, un Hijo Lanonandek de gran brillantez. «Y no es maravilla, porque Satanás mismo es una brillante criatura de la luz».En el transcurso de esta inspección, Satanás informó a Caligastia sobre la entonces «Declaración de Libertad» de Lucifer, que éste proponía, y el Príncipe acordó en traicionar al planeta cuando se anunciara la rebelión. El Hijo Creador expresó este desacato al decir: «Eres como tu jefe Lucifer, y has perpetuado pecaminosamente su iniquidad. Fue un falsificador desde el comienzo de su exaltación de sí mismo, porque no moraba en la verdad».En la gestión administrativa de un universo local, ningún encargo alto se considera más sagrado que el que se deposita en un Príncipe Planetario, quien asume la responsabilidad del bienestar y la dirección de los mortales evolutivos en un mundo recién habitado. De todas las formas de la maldad, ninguna destruye más la condición de la personalidad que la traición de un encargo y la deslealtad a los amigos de confianza. Al cometer este pecado deliberado, Caligastia deformó su personalidad de forma tan completa que su mente nunca más ha podido recuperar completamente el equilibrio.             Tomado del L.U.

sábado, 26 de octubre de 2013

La consideración del pecado

Hay muchas maneras de considerar el pecado; pero desde el punto de vista filosófico del universo, el pecado es la actitud de una personalidad que deliberadamente resiste la realidad cósmica. Se puede considerar el error como un concepto erróneo o una deformación de la realidad. La maldad es una realización parcial de las realidades del universo o una falta de adaptación a ellas. Pero el pecado es una resistencia intencional a la realidad divina —el optar conscientemente oponerse al progreso espiritual— en tanto que la iniquidad consiste en desafiar abierta y persistentemente la realidad reconocida y supone tal grado de desintegración de la personalidad que raya en la locura cósmica.

El error sugiere la falta de agudeza intelectual; la maldad, deficiencia de sabiduría; el pecado, pobreza espiritual abyecta; pero la iniquidad indica la pérdida del dominio de la personalidad.Cuando se opta tantas veces por el pecado y se lo repite tan a menudo, éste puede convertirse en hábito. Los pecadores habituales pueden volverse fácilmente inicuos, rebeldes incondicionales contra el universo y todas sus realidades divinas. Bien que se puede perdonar toda clase de pecado, dudamos que el inicuo empedernido jamás sienta arrepentimiento por sus fechorías o acepte el perdón de sus pecados.

Tomado del Libro de Urantia

viernes, 25 de octubre de 2013

El final de la rebelión de Lucifer

No anticipamos la eliminación de las presentes restricciones de Satania hasta tanto los Ancianos de los Días no hagan su disposición final de los archirrebeldes. Los circuitos del sistema no serán restablecidos siempre y cuando viva Lucifer. Mientras tanto, está totalmente inactivo.

La rebelión ha terminado en Jerusem. Termina en los mundos caídos en cuanto llegan los Hijos Divinos. Creemos que todos los rebeldes que en algún momento pudieran aceptar la misericordia ya lo han hecho. Aguardamos la emisión del informe de la decisión que privará a estos traidores de la existencia de la personalidad. Anticipamos que el veredicto de Uversa será pronunciado mediante la transmisión ejecutiva que efectuará la aniquilación de estos rebeldes internados. Después de ello, buscaréis sus lugares, pero no los hallaréis. «Y los que os conozcan entre los mundos se espantarán al veros; habéis sido un terror, pero nunca jamás lo seréis nuevamente». Así pues todos estos traidores especiales «serán como si nunca hubiesen sido». Todos aguardan el decreto de Uversa. Pero durante muchas edades los siete mundos de prisión de la oscuridad espiritual en Satania han constituido una advertencia solemne para todo Nebadon, que proclama elocuente y eficazmente la gran verdad de que «el camino del transgresor es duro»; que «cada pecado encierra la semilla de su propia destrucción»; que «la paga del pecado es muerte».                                                            
Tomado del Libro de Urantia


jueves, 24 de octubre de 2013

La soberanía de Cristo Miguel

Al asumir la soberanía suprema de Nebadon, Miguel solicitó de los Ancianos de los Días la autoridad para internar a todas las personalidades que participaron en la rebelión de Lucifer hasta que se emitiesen las decisiones de los tribunales superuniversales en el juicio de Gabriel vs. Lucifer, asentado en los registros del tribunal supremo de Uversa casi doscientos mil años atrás, en nuestra medida de tiempo. En cuanto al grupo de la capital del sistema, los Ancianos de los Días otorgaron la solicitud de Miguel con sólo una excepción: se permitió que Satanás realizara visitas periódicas a los príncipes apóstatas en los mundos caídos hasta que otro Hijo de Dios fuera aceptado por estos mundos apóstatas, o hasta el momento en que los tribunales de Uversa comenzaran la adjudicación del caso de Gabriel vs. Lucifer.
Satanás podía venir a Urantia porque no había un Hijo de alta categoría en residencia —ni un Príncipe Planetario ni un Hijo Material. Maquiventa Melquisedek ha sido proclamado desde entonces Príncipe Planetario vicegerente de nuestro mundo, y la apertura del caso de Gabriel vs. Lucifer ha señalado la inauguración de regímenes temporales planetarios en todos los mundos aislados. Es verdad que Satanás visitó periódicamente a Caligastia y a otros de los Príncipes caídos hasta la epoca de estas revelaciones,momento en el cual ocurrió la primera audiencia de la solicitud presentada por Gabriel para la aniquilación de los archirrebeldes. Satanás está ahora incondicionalmente detenido en los mundos de prisión de Jerusem.A partir del autootorgamiento final de Miguel nadie en todo Satania ha deseado ir a los mundos de prisión para ministrar a los rebeldes internados. Y ningún otro ser ha sido atraído a la causa del traidor. Durante más de dos mil  años no ha cambiado esta condición.                         Tomado del Libro de Urantia

miércoles, 23 de octubre de 2013

El estado presente de la rebelión de Lucifer

En los primeros días de la rebelión de Lucifer, Miguel ofreció salvación a todos los rebeldes. A todos los que demostraran un arrepentimiento sincero, ofreció, en cuanto llegara a la completa soberanía universal, perdón y restablecimiento a alguna forma de servicio universal. Ninguno de los líderes aceptó esta oferta misericordiosa. Pero miles de los ángeles y las órdenes inferiores de los seres celestiales, incluyendo a cientos de Hijos e Hijas Materiales, aceptaron la misericordia proclamada y se les otorgó rehabilitación al tiempo de la resurrección de Jesús mas de dos mil años atrás. Estos seres desde entonces han sido transferidos al mundo del Padre de Jerusem, en el cual deben permanecer, técnicamente, hasta que los tribunales de Uversa emitan una decisión en el sumario de Gabriel vs. Lucifer. Pero nadie duda de que, cuando se emita el veredicto de aniquilación, estas personalidades arrepentidas y salvadas serán eximidas del decreto de extinción. Estas almas probacionarias trabajan ahora en la tarea de cuidar el mundo del Padre.
Lucifer no ha estado en nuestro mundo desde los días en que intentó desviar a Cristo Miguel del propósito de completar el autootorgamiento y establecerse final y certeramente como gobernante incondicional de Nebadon. Cuando Miguel se volvió el jefe establecido del universo de Nebadon, Lucifer fue detenido por los agentes de los Ancianos de los Días de Uversa y desde entonces ha estado encarcelado en el satélite número uno del grupo del Padre de las esferas de transición de Jerusem. Y aquí los gobernantes de otros mundos contemplan el fin del Soberano infiel de Satania. Pablo conocía el estado de estos líderes rebeldes después del autootorgamiento de Micael, pues escribió de los jefes de Caligastia que eran «huestes espirituales de maldad en las regiones celestiales».                                  Tomado del Libro de Urantia

martes, 22 de octubre de 2013

La fé,armadura eficaz contra el pecado


Antes del autootorgamiento de Miguel en nuestro mundo estos gobernantes de la oscuridad trataron de mantener su autoridad en el mundo, y persistentemente se resistieron a las personalidades menores y subordinadas. Pero a partir del día de Pentecostés, este traicionero Caligastia y su igualmente despreciable asociado Daligastia, son serviles ante la majestad divina de los Ajustadores del Pensamiento Paradisiacos y el protector Espíritu de la Verdad, el espíritu de Micael, que ha sido derramado sobre toda la carne.
Pero aún así, ningún espíritu caído tuvo jamás el poder de invadir la mente o de acosar las almas de los hijos de Dios. Ni Satanás ni Caligastia podrían tocar o acercarse a los hijos de Dios por la fe; la fe es una armadura eficaz contra el pecado y la iniquidad. Es verdad: «Aquel que nace de Dios se guarda y el maligno no le toca».
 En general, cuando se supone que los mortales débiles y disolutos están bajo la influencia de los diablos y demonios es que les dominan meramente sus propias tendencias inherentes y viles, siendo descarriados por sus propias propensiones naturales. Al diablo se ha acreditado mucho del mal que no le pertenece. Caligastia ha sido comparativamente impotente a partir de la cruz de Cristo.

Tomado del Libro de Urantia

domingo, 20 de octubre de 2013

El triunfo del Hijo del Hombre

El Hijo del Hombre confiaba en el éxito, y sabía que su triunfo en nuestro mundo establecería por siempre el estado de sus enemigos de toda una edad, no solamente en Satania sino también en los otros dos sistemas adonde había penetrado el pecado. Hubo supervivencia para los mortales y certidumbre para los ángeles, cuando el Maestro, en respuesta a las propuestas de Lucifer, respondió calmadamente y con certidumbre divina, «Vete detrás de mí, Satanás». Ése fue, en principio, el fin verdadero de la rebelión de Lucifer. Es verdad que los tribunales de Uversa aún no han emitido la decisión ejecutiva respecto de la apelación de Gabriel solicitando la destrucción de los rebeldes, pero un tal decreto indudablemente será emitido en la plenitud del tiempo, puesto que el primer paso en la adjudicación de este caso ya ha sido tomado.Caligastia estuvo como Príncipe técnico de este mundo hasta cerca del tiempo de su muerte del Maestro. Dijo Jesús: «Ahora es el juicio de este mundo; ahora caerá el Príncipe de este mundo». Luego aún más cerca de completar la misión de su vida anunció: «El Príncipe de este mundo es juzgado». Y es este mismo Príncipe fué derrocado y desacreditado.La última acción de Cristo Miguel antes de abandonar nuestro mundo consistió en ofrecer misericordia a Caligastia, el Diablo,y Daligastia su asistente, pero despreciaron su tierna oferta. Caligastia, nuestro Príncipe Planetario apóstata,aún está libre en nuestro mundo de perseguir sus nefastos designios, pero no tiene absolutamente ningún poder para entrar en la mente de los hombres, ni tampoco puede acercarse a sus almas para tentarlas o corromperlas a menos que realmente deseen ser maldecidas por su malvada presencia.
Tomado del Libro de Urantia

sábado, 19 de octubre de 2013

El Hijo del Hombre en nuestro mundo.

En muchos aspectos la rebelión de Lucifer fue la más desastrosa y de mayor magnitud de todos estos sucesos en Nebadon. Hubo más personalidades comprometidas en esta insurrección que en las otras dos juntas. Es deshonor eterno para ellos que los emisarios de Lucifer y Satanás no exceptuaron las guarderías de capacitación de infantes en el planeta cultural finalista, sino que más bien intentaron corromper estas mentes en desarrollo misericordiosamente salvadas de los mundos evolucionarios.
 Lucifer y Satanás deambularon libremente por el sistema de Satania hasta que se completó la misión de autootorgamiento de Cristo-Micael en nuestro mundo. Estuvieron juntos por última vez en el momento de su ataque combinado contra el Hijo del Hombre.Anteriormente, cuando los Príncipes Planetarios, los «Hijos de Dios» se congregaban periódicamente, «Satanás también concurría», afirmando que representaba a todos los mundos aislados de los Príncipes Planetarios caídos. Pero, desde el autootorgamiento final de Cristo Micael no se le volvió a acordar dicha libertad en Jerusem. Posteriormente a sus esfuerzos por corromper a Micael durante su autootorgamiento en la carne, toda compasión por Lucifer y Satanás ha perecido en todo Satania, o sea, fuera de los mundos aislados de pecado.El autootorgamiento de Micael terminó la rebelión de Lucifer en todo Satania fuera de los planetas de los Príncipes Planetarios apóstatas. Y éste fue el significado de la experiencia personal de Jesús poco antes de su muerte en la carne cuando cierto día exclamó a sus discípulos: «Y contemplo cómo cae Satanás desde el cielo como un rayo». Había concurrido a este mundo con Lucifer para sostener una última contienda crucial.                                                                                    Tomado del Libro de Urantia  

viernes, 18 de octubre de 2013

La Historia de la Rebelión

 La rebelión de Lucifer abarcó todo el sistema. Treinta y siete Príncipes Planetarios en secesión entregaron sus mundos al archirrebelde.Las órdenes más altas del universo local no se unieron a la secesión de Lucifer, aunque algunos de los Portadores de Vida estacionados en los planetas rebeldes estuvieron un tanto influidos por la rebelión. Ninguno de los Hijos Trinidizados se descarrió.Los Melquisedek, los arcángeles y las Estrellas Brillantes Vespertinas se mantuvieron todos leales a Micael y, con Gabriel, lucharon valientemente por la voluntad del Padre y el gobierno del Hijo.Ningún ser del Paraíso participó en la deslealtad.Ninguno de los conciliadores traicionó, tampoco ni se descarrió uno solo de los Registradores Celestiales.Pero hubo grandes pérdidas entre los Compañeros Morontiales y los Maestros de los Mundos de Estancia.De la orden suprema de los serafines, no se perdió ni un solo ángel, pero un grupo considerable de la orden siguiente, la orden superior, fue engañado y engatusado.Se descarriaron algunos de la orden tercera o supervisora de ángeles. Pero el colapso terrible se produjo en el cuarto grupo,los serafines que están normalmente asignados al servicio de las capitales de los sistemas.Se salvó a casi dos tercios de ellos, pero los restantes siguieron a las filas rebeldes. Un tercio de todos los querubines de vinculados a los ángeles se perdieron con sus serafines desleales. Juan vio esto simbólicamente cuando escribió del gran dragón rojo, diciendo: «Y su cola atrajo a una tercera parte de las estrellas del cielo y las lanzó a la obscuridad».La pérdida más grande aconteció en las filas angélicas, pero la mayoría de las órdenes más bajas de inteligencia participaron en la deslealtad.El noventa y cinco por ciento de Hijos materiales se perdieron en la rebelión de Lucifer. Grandes números de seres intermedios se perdieron en los planetas individuales cuyos Príncipes Planetarios abrazaron la causa de Lucifer.

jueves, 17 de octubre de 2013

La guerra en los cielos


 «Había guerra en los cielos; el comandante de Micael y sus ángeles lucharon contra el dragón (Lucifer, Satanás y los príncipes apóstatas); y el dragón y sus ángeles rebeldes lucharon pero no prevalecieron». Esta «guerra en los cielos» no fue una batalla física tal como se la puede concebir en nuestro mundo. 

En los primeros días de la lucha Lucifer permaneció continuamente en el anfiteatro planetario. Gabriel condujo una exposición incesante de los sofismas rebeldes desde su sede central situada en las cercanías. Las varias personalidades presentes en la esfera que tuvieran duda en cuanto a su actitud se trasladaban de uno a otro sitio, escuchando las disertaciones hasta llegar a una decisión final.

Pero esta guerra en los cielos fue muy terrible y muy real. Aunque no exhibía ninguna de las barbaridades tan características de la guerra física en los mundos inmaduros, este conflicto era mucho más mortífero; la vida material corre peligro en el combate material, pero la guerra en los cielos se peleó en términos de vida eterna.

Tomado del Libro de Urantia

martes, 15 de octubre de 2013

La naturaleza de la rebelión de Lucifer

Cuando estalló la rebelión de Satania, Miguel se aconsejó con su hermano Paradisiaco, Emanuel. Después de esta conferencia pletórica, Miguel anunció que seguiría la misma política que lo había caracterizado en levantamientos similares en el pasado, o sea, una actitud de no interferencia.En el momento de esta rebelión y de las dos que la precedieron no existía una autoridad soberana absoluta y personal en el universo de Nebadon. Miguel gobernaba por derecho divino, como vicegerente del Padre Universal, pero aún no por su propio derecho personal. No había completado su carrera de autootorgamiento; aún no se le había otorgado de «todo el poder en el cielo y en la tierra».Desde el momento en que estalló la rebelión hasta el día de su coronación como soberano gobernante de Nebadon, Miguel no interfirió jamás con las fuerzas rebeldes de Lucifer; se les permitió a éstas seguir un curso libre por casi doscientos mil años del tiempo nuestro. Cristo Miguel tiene ahora amplio poder y autoridad para tratar prontamente tales estallidos de deslealtad, pero no creemos que esta autoridad soberana le conduzca a actuar en forma diferente si se produce otro levantamiento semejante.Puesto que Miguel eligió mantenerse al margen de la rebelión de Lucifer, Gabriel convocó su séquito personal en Edentia y, por consejo de los Altísimos, eligió asumir el mando de las huestes leales de Satania. Miguel permaneció en Salvington mientras que Gabriel prosiguió a Jerusem, y estableciéndose en la esfera dedicada al Padre —el mismo Padre Universal cuya personalidad Lucifer y Satanás ponían en duda—, en la presencia de las huestes de las personalidades leales, izó la bandera de Miguel, el emblema material del gobierno Trinitario de toda la creación, los tres círculos concéntricos azules sobre un fondo blanco.El emblema de Lucifer era una bandera blanca con un círculo rojo, en el centro del cual aparecía un sólido círculo negro.L.U.

lunes, 14 de octubre de 2013

Las rebeliones en nuestro Universo

Aunque han habido dos rebeliones previas en Nebadon, éstas acontecieron en constelaciones distantes. Lucifer sostenía que estas insurrecciones no habían triunfado porque la mayoría de las inteligencias fracasó en seguir a sus líderes. Opinaba que «el gobierno pertenece a las mayorías», que «la mente es infalible». La libertad que le brindaron los gobernantes universales aparentemente contribuyó a alimentar muchas de sus opiniones nefastas. Desafió a todos sus superiores; sin embargo no parecieron tomar nota de sus acciones. Se le permitió proseguir en su plan seductor sin obstáculos ni frenos.Todas las demoras misericordiosas de la justicia, las señaló Lucifer como prueba de la incapacidad de los Hijos Paradisiacos para detener la rebelión. Él desafiaba abiertamente y en forma arrogante a Miguel, a Emanuel, a los Ancianos de los Días y luego señalaba el hecho de que no se había producido acción alguna, como prueba positiva de la impotencia de los gobiernos universales y superuniversales.
Gabriel estaba presente personalmente a lo largo de todos estos procedimientos desleales y tan sólo anunció que él, a su debido tiempo, hablaría por Miguel, y que todos los seres tendrían libertad y no serían molestados en su elección; que el «gobierno de los Hijos en nombre del Padre tan sólo deseaba lealtad y devoción voluntarias, sinceras y a prueba de sofismas».Se le permitió a Lucifer establecer completamente y organizar totalmente su gobierno rebelde, antes de que Gabriel hiciera esfuerzo alguno por disputar su derecho a la secesión ni por contrarrestar la propaganda rebelde. Pero los Padres de la Constelación inmediatamente confinaron la acción de estas personalidades desleales al sistema de Satania. Durante varios años todo fue caótico, y hubo gran confusión en los mundos de estancia.                                Tomado del Libro de Urantia

domingo, 13 de octubre de 2013

El estallido de la Rebelión de Lucifer

 El manifiesto de Lucifer fue emitido en el cónclave anual de Satania en el mar de cristal, en presencia de las huestes reunidas de Jerusem, el último día del año, alrededor de doscientos mil años atrás, de nuestro tiempo. Satanás proclamó que se podrían adorar las fuerzas universales —físicas, intelectuales y espirituales— pero que tan sólo se podrá tener lealtad al gobernante presente y actual, Lucifer, el «amigo de los hombres y de los ángeles» y el «Dios de la libertad».La autoaserción fue el grito de batalla de la rebelión de Lucifer. Uno de sus argumentos principales fue que, si el autogobierno era bueno y justo para los Melquisedek y otros grupos, debía de ser igualmente bueno para todas las órdenes de inteligencia. Fue atrevido y persistente en advocar la «igualdad de la mente» y «la hermandad de la inteligencia». Afirmaba que todo gobierno debía limitarse a los planetas locales y a su confederación voluntaria en los sistemas locales. Rechazaba toda la demás supervisión. Prometió a los Príncipes Planetarios que gobernarían los mundos como ejecutivos supremos. Denunció la ubicación de las actividades legislativas en la sede central de la constelación y la conducta de los asuntos judiciales en la capital del universo. Sostenía que todas estas funciones de gobierno debían estar concentradas en las capitales de los sistemas y procedió a establecer su propia asamblea legislativa y organizó sus propios tribunales bajo la jurisdicción de Satanás. Y llamó a los príncipes de los mundos apóstatas para que hicieran lo mismo.
Todo el gabinete administrativo de Lucifer le siguió y todos prestaron juramento públicamente como funcionarios de la administración del nuevo jefe de «mundos y sistemas liberados».

Tomado de LIbro de Urantia

sábado, 12 de octubre de 2013

El Manifiesto de Lucifer.2a.Parte

 Lucifer sostenía que se podía impedir a los ejecutores de los Ancianos de los Días actuar en los sistemas locales si los seres nativos se atrevían a afirmar su propia independencia. Mantenía que la inmortalidad era inherente en las personalidades del sistema, que la resurrección era natural y automática, y que todos los seres vivirían eternamente salvo cuando se lo impidiesen acciones arbitrarias e injustas de los ejecutantes de los Ancianos de los Días.
Lucifer sostenía que se gastaba demasiado tiempo y energía en el esquema de capacitar en forma tan completa a los mortales ascendentes sobre los principios de la administración del universo, principios que según él, eran poco éticos pero irracionales. Protestó contra el programa que duraba una entera edad de preparación de los mortales del espacio para un destino desconocido y señaló la presencia del cuerpo de los finalistas en Jerusem como prueba de que estos mortales habían pasado edades preparándose para un destino de pura ficción. Burlonamente señaló que los finalistas habían encontrado un destino no más glorioso que el de volver a las humildes esferas similares a las de su propio origen. Sugirió que demasiada disciplina y capacitación prolongada les habían corrompido y que en realidad eran traidores de sus semejantes mortales puesto que ahora cooperaban en un esquema de esclavización de la creación entera a las ficciones de un mítico destino eterno para los mortales ascendentes. Advocó que los ascendenteros debían disfrutar de la libertad de autodeterminación individual. Desafió y condenó el entero plan de ascensión mortal tal como estaba patrocinado por los Hijos de Dios Paradisiacos y apoyado por el Espíritu Infinito.
 Y fue con una Declaración de Libertad de este tipo que Lucifer lanzó su orgía de oscuridad y muerte.                                              Tomado del Libro de Urantia

viernes, 11 de octubre de 2013

El Manifiesto rebelde de Lucifer 1a.Parte

 Cualesquiera hayan sido los orígenes primeros de la desazón en los corazones de Lucifer y Satanás, la explosión final tomó la forma de la Declaración Luciferina de Libertad. La causa de los rebeldes se expresó bajo tres encabezamientos:
 La realidad del Padre Universal. Lucifer alegaba que el Padre Universal en realidad no existía, que la gravedad física y la energía espacial eran inherentes al universo, y que el Padre era un mito inventado por los Hijos Paradisiacos con el objeto de retener el gobierno de los universos en el nombre del Padre. Negó que la personalidad fuera un don del Padre Universal. Aun sugirió que los finalistas estaban en confabulación con los Hijos Paradisiacos para imponer el fraude sobre toda la creación, puesto que nunca volvían trayendo una idea muy clara de la personalidad auténtica del Padre tal como se la discierne en el Paraíso. Confundió reverencia por ignorancia. La acusación era enorme, terrible, y blasfema. Fue este ataque velado contra los finalistas el que sin duda influyó sobre los ciudadanos ascendentes por entonces en Jerusem para que éstos permanecieran firmes y se mantuvieran constantes en su resistencia a todas las propuestas rebeldes.
El gobierno universal del Hijo Creador —Miguel. Lucifer sostenía que los sistemas locales debían de ser autónomos. Protestó contra el derecho de Miguel, el Hijo Creador, a la soberanía de Nebadon en nombre de un hipotético Padre Paradisiaco y la exigencia de que todas las personalidades reconocieran su lealtad a este Padre invisible. Afirmó que el entero plan de adoración era un esquema sagaz para agrandar a los Hijos Paradisiacos. Estaba dispuesto a reconocer a Miguel como su Padre Creador, pero no como su Dios y gobernante legítimo.
Tomado del Libro de Urantia

jueves, 10 de octubre de 2013

Las causas de la rebelión de Lucifer

Lucifer y su primer asistente, Satanás, habían reinado en Jerusem por más de quinientos mil años cuando en su corazón comenzaron a alinearse contra el Padre Universal y su Hijo Miguel por entonces vicegerente.No existían en el sistema de Satania condiciones peculiares o especiales que sugiriesen o favoreciesen la rebelión. Creemos que la idea se originó y formó en la mente de Lucifer, y que pudo haber instigado dicha rebelión sin importar donde estuviera estacionado. Lucifer anunció primero sus planes a Satanás, pero se requirieron varios meses para que éste se convirtiera a las teorías rebeldes, se volvió un defensor atrevido y entusiasta de la «la autoaserción y libertad».Nadie jamás le sugirió a Lucifer la idea de una rebelión. La idea de la autoaserción, en oposición a la voluntad de Hijo Creador y a los planes del Padre Universal, tal como los presentaba Miguel, tuvo origen en su propia mente. Sus relaciones con el Hijo Creador habían sido íntimas y siempre cordiales. En ningún momento antes de la exaltación de su propia mente expresó Lucifer abiertamente falta de satisfacción respecto de la administración del universo. A pesar de su silencio, por más de cien años del tiempo estándar, el Unión de los Días en Salvington había estado observando que no reinaba completamente la paz en la mente de Lucifer. Esta información también fue comunicada al Hijo Creador y a los Padres de la Constelación.A lo largo de este período Lucifer se volvió cada vez más crítico del plan total de la administración universal, pero siempre profesó lealtad sincera a los Gobernantes Supremos.Su primera deslealtad abierta se manifestó con motivo de una visita de Gabriel a Jerusem, apenas unos pocos días antes de la proclamación abierta de la Declaración Luciferina de Libertad.                          Tomado de Libro de Urantia

miércoles, 9 de octubre de 2013

La influencia de LUcifer en nuestro mundo

 Muy poco se oyó acerca de Lucifer en nuestro mundo debido al hecho de que asignó a su primer ayudante, Satanás, para abogar por su causa en nuestro planeta. Satanás formaba parte del mismo grupo primario de Lanonandek pero no había actuado nunca como Soberano del Sistema; participó plenamente en la insurrección de Lucifer. El «diablo» no es sino Caligastia, el Príncipe Planetario depuesto de nuestro mundo y un Hijo de la orden secundaria de Lanonandek. Cuando Cristo Miguel estaba en nuestro mundo en la carne, Lucifer, Satanás y Caligastia se aliaron para precipitar el fracaso de la misión de autootorgamiento. Pero claramente fracasaron.

Abadón era el jefe del séquito de Caligastia en nuestro mundo. Siguió a su jefe en la rebelión y desde entonces ha actuado como jefe ejecutivo de los rebeldes en este mundo. Beelzebú era el líder de los seres intermedios desleales que se aliaron con las fuerzas del traicionero Caligastia.

El dragón se volvió finalmente la representación simbólica de todos estos personajes malvados. Cuando triunfó Cristo Miguel, «Gabriel bajó de Salvington y encadenó al dragón (todos los líderes rebeldes) por una edad». De los rebeldes seráficos de Jerusem se ha escrito: «Y a los ángeles que no mantuvieron su estado primario sino que abandonaron su propia morada, aseguró con fuertes cadenas de oscuridad hasta el juicio del gran día».

Tomado del Libro de Urantia

martes, 8 de octubre de 2013

La personalidad de Lucifer


Lucifer era un ser magnífico, una personalidad brillante; estaba junto a los Padres Altísimos de la constelación en la línea directa de la autoridad universal. A pesar de la transgresión de Lucifer, antes del autootorgamiento de Miguel en nuestro mundo, las inteligencias subordinadas evitaron faltarle al respeto y desdeñarlo. Aun el arcángel de Miguel, al tiempo de la resurrección de Moisés, «no emitió juicio contra él, sino que simplemente dijo: ‘el Juez te reprenda'». El juicio en tales asuntos pertenece a los Ancianos de los Días, los gobernantes del superuniverso.

Lucifer es ahora el Soberano caído y depuesto de nuestro sistema,Satania. La autocontemplación es sumamente desastrosa, aun para las personalidades excelsas del mundo celestial. De Lucifer se dijo: «Tu corazón se enalteció por tu hermosura; tu esplendor corrompió tu sabiduría». Nuestro antiguo profeta vio este triste estado cuando escribió: «¡Cómo caíste de los cielos, O Lucero, hijo de la mañana! ¡Cómo has sido derribado, tú que te atreviste a confundir a los mundos!».


Tomado del Libro de Urantia

lunes, 7 de octubre de 2013

La rebelión de Lucifer

LUCIFER era un brillante Hijo Lanonandek primario de Nebadon. Había servido en muchos sistemas, había sido un consejero elevado de su grupo, y se distinguía por su sabiduría, sagacidad y eficiencia. Lucero, o sea, Lucifer era el número 37 de su orden, y cuando fue comisionado por los Melquisedek, se le distinguió como una de las cien personalidades más hábiles y brillantes entre más de setecientos mil de su tipo. Desde comienzos tan magníficos, a través del mal y del error, abrazó el pecado y ahora se lo numera como uno de los tres Soberanos de nuestro Sistema en Nebadon que sucumbieron al impulso del yo y se rindieron a los sofismas de la libertad personal espuria —el rechazo de la lealtad universal y el descuido de las obligaciones fraternales, la ceguera a las relaciones cósmicas.
En el universo de Nebadon, el dominio de Cristo Miguel, hay diez mil sistemas de mundos habitados. En toda la historia de los Hijos Lanonandek, en todo su trabajo a través de estos miles de sistemas y en la sede central del universo, tan sólo tres Soberanos de los Sistemas han sido hallados en desacato al gobierno del Hijo Creador.Lucifer no era un ser ascendente; fue un Hijo creado del universo local, y de él se dijo: «Perfecto eras en todos tus caminos desde el día en que fuiste creado hasta que se halló en ti injusticia». Muchas veces había estado en consejo con los Altísimos de Edentia. Y Lucifer reinaba «sobre la montaña sagrada de Dios», la montaña administrativa de Jerusem, porque era el ejecutivo en jefe de un gran sistema de 607 mundos habitados.
Tomado del Libro de Urantia

martes, 1 de octubre de 2013

El buen liderazgo es vital para el progreso

 La sabiduría, la visión y la previsión son indispensables para que duren las naciones. La civilización nunca estará en peligro hasta que el liderazgo hábil comience a desaparecer. El porcentaje de tal liderazgo sabio no ha excedido nunca al uno por ciento de la población.

Por estos peldaños de la escala evolucionaria se ha encaramado la civilización hasta ese punto en el que pudieron iniciarse aquellas influencias poderosas que han culminado en la cultura en rápida expansión de la actualidad. Y sólo mediante la adherencia a estos factores esenciales, el hombre puede esperar mantener su civilización actual, contribuyendo a la vez a su desarrollo continuo y a su sobrevivencia segura.

Ésta es la esencia de la larga, larga lucha de los pueblos de la tierra por establecer la civilización desde los tiempos de Adán. La cultura de hoy día es el resultado neto de esta ardua evolución. Antes del descubrimiento de la imprenta, el progreso fue relativamente lento puesto que una generación no podía beneficiarse tan rápidamente de los logros de sus predecesores. Pero ahora la sociedad humana arremete hacia adelante bajo la fuerza del impulso acumulado de todas las edades a través de las cuales ha luchado y seguirá luchando la civilización.

Tomado del Libro de Urantia