Queridos, ¿cómo describirían al Yo Superior?
¿Qué es para ustedes? ¿Es elusivo? ¿Cuántos de ustedes lo ven realmente como su
ser? Eso es difícil. Y para aquellos que sí lo ven como su ser, ¿cuántos
hicieron la pregunta: Quién eres tú? La verdad de este asunto, queridos, es que
ustedes son derivados de la Fuente Central, que es Dios, y aunque hemos dicho
que tienen simiente estelar, cada uno de ustedes, esas simientes son múltiples,
o sea que hay de los pleyadianos y antes que ellos, la semilla de los
arturianos, y las semillas de Orión. Tanto de esto recogido para ayudar,
protegido por el Ashtar, tantos grupos son parte de ustedes; pero todos ellos
fueron alguna vez corpóreos. No estoy hablando de eso.
¿Qué es la esencia? ¿Qué es la esencia? Para
que ustedes verdaderamente vean esto, lo que está dentro de ustedes, de verdad,
que representa a lo que les está hablando ahora, y que está disponible como
experiencia a través de la pineal. ¿Quién eres? Volvemos a esto. Cuando
empezamos a hablarles, en las canalizaciones del principio, usábamos cosas que
eran metáforas, y sin embargo no lo eran. Empezamos a hablarles de la Física
del amor.
Hay una energía en el planeta que no pueden
negar que exista, que no tiene explicación, ni reglas, que está llena de
emoción, y es el Amor.
Madre,
la primera vez que miras a tu niño, lo sostienes contra tu pecho, acaba de
salir de tu cuerpo, han cortado el cordón umbilical, si tienes suerte el niño
te mira a los ojos: he allí la conexión. Y esa conexión es para siempre.
¿Puedes negar las emociones que están allí? ¿Y cómo piensas en ese niño, ese
bebé, ahora? ¿Te das cuenta de que ese cordón nunca se cortó? Físico, ¿cómo
explicas esto? ¿Es energía? ¿No es energía?
¡Es energía de emoción, y es algo para
siempre! La humanidad lo descarta: es sólo una emoción. ¿O podría ser que haya
Física en eso? ¿Y si la hubiera, cuál es?
Hace veinte años les dijimos esto – veinte
años – que el espacio entre el núcleo y la nube de electrones en la estructura
atómica estaba lleno con la Física del amor. Y hubo algunos que pensaron: “Ah,
¡qué dulce es eso! ¡Kryon hace palpitar nuestro corazón cuando pensamos en esas
cosas!” Bueno, nada de palpitaciones involucradas; ¡allí hay Física! ¡Y ESTO es
lo que queremos que entiendas! ¿De dónde vienes? ¿Qué es el Hogar? ¿Y cuál es
la conexión, y quién eres? Ahora es tiempo de repasar lo que necesitas oír.
Ustedes están llenos de una Fuente que es más
grandiosa que lo grandioso, más pura que lo puro, y en la medida que siguen con
la evolución de la consciencia humana, esto no llegará a ningún lado a menos
que ustedes verdaderamente reconsideren esto una y otra, y otra vez; es decir,
que en la esencia de todo está el amor. Y ustedes empiezan a tejer las
conexiones entre un humano y otro y otro más ¡y se dan cuenta de que hay una
conexión de amor entre todos ustedes, si lo permiten! ¿A quién no quieren amar?
¡Sería bueno que piensen en eso! Porque el nuevo ser humano verá las conexiones
entre todos. La capacidad de amar lo no-amable es simplemente evolución,
evolución consciente, evolución espiritual; reúne a la Tierra de una forma
inesperada. Cuando ustedes puedan mirar a alguien, sin importar qué hace, y
volcar sus corazones hacia esa persona, y ayudarla. No acusarla, ni juzgarla.
Eso sí que es nuevo, ¿verdad?
Podrían entonces comprender a la Fuente.
Cuando la vieron en los Maestros que caminaron en este planeta, cuando las
mismas flores de la Tierra florecían a su paso, cuando los seguían los
animales, ¿qué creen ustedes que era eso? ¿Piensan que es dulce? ¿O piensan que
allí podría haber algo? Algo que está más allá de la comprensión, algo que no
pueden medir, que es la Física de la Fuente Creadora y está en ustedes. Cuanto
más alto opera tu ADN, más amor habrá en las células de tu cuerpo, y ese es el
amor del Creador, no el amor del yo, y sin embargo te decimos, querido ser
humano, que has de aprender a amar esta parte de ti. ¡Debes mirarte a los ojos
y amarla!
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