Una nueva vida social y espiritual.-A. Bessant.

Es muy cierto de que en todos los países existen un buen número de personas que procuran ajustar sus sistemas de conducta a los preceptos de una moral sana y bien dirigida;pero en todo el mundo no hay ni un sólo pueblo que,al reconocer la justicia de una buena moral,las ponga en práctica;antes por el contrario las desmiente en todas las instituciones que organiza para defenderse y atacar a naciones hermanas,y lo peor es que las clases sociales dominantes económicamente no concretan en obras los principios que de palabra supuestamente reconocen.

Así pues necesitamos un Nuevo Orden Mundial,nuevas revelaciones,nuevos mensajes llenos de Amor y no de odio,no solamente para que nos declaren nuevas verdades,sino para también infundirnos la inspiración que nos permita practicarlas e incorporarlas a nuestras conductas diarias para que de ésta manera se fortalezca la familia como base de toda las Instituciones Sociales.Cuando ,es indudable que ésa no será sólo nuestra labor;necesitamos algo o alguien que de una vez por todas que lidere el propósito de elevar nuestra conciencia,pero seremos nosotros a la luz de todas sus enseñanzas quienes deberemos resolver por nosotros mismos los problemas que tanto nos preocupan.

La humanidad ha evolucionado mucho desde la llegada de muchos instructores espirituales,y  ahora es mayor la inteligencia de nosotros los mortales,pues en la actualidad,se ha elevado el nivel de la mentalidad humana.Pero también es un verdadero hecho de que en la actualidad se está despertando la conciencia social y la conciencia espiritual; Si de veras consideramos que es necesaria la venida de un Gran Ser,no lo esperamos como un gran conquistador de gran poderío mortal,sino como un verdadero instructor que nos muestre el camino de la verdad actual,dado el momento de cambio espiritual que se está presentando en los momentos actuales para poner nuestros actos a la altura de nuestras verdaderas aspiraciones espirituales.

Nuestro mundo sueña con una vida social y espiritual que deba deslumbrar la mente de muchos y que conmueva los corazones humanos,con el propósito de edificar una plena espiritualidad en todos los hombres y mujeres preparándolos para el nuevo orden espiritual que ya pronto se avecina.