rEl amor del
cual ahora hablaremos, no es solamente el amor de pareja, el que pueda existir
en tus relaciones interpersonales - del tipo que ellas sean. Ahora hablaremos,
mi querido ser humano, de una relación de amor mucho mas intensa. La relación
que tú tienes con tu Ser Superior, con el Ser Espiritual que tú piensas que
eres…
Si tú ahora
te encuentras aquí en la búsqueda de respuestas, ¿por qué crees que viniste? Tú
acudiste a esta Reunión de Familia porque sentiste que la relación con tu Ser
Superior - con el Ser Espiritual que tú sabes que integras - necesitaba ser
alimentada con Amor. ¿Es que acaso piensas que eres el único, la única… que
añora ese contacto?
Yo, Kryon,
te observo: yo sé quién eres. Conozco tu nombre, Sé lo que tú piensas. Sé lo
que tú haces. Y te oigo cada vez que tú clamas a ese Ser Espiritual atemporal a
quien tú llamas Dios o a ese Ser Superior que tú has magnificado… ¡Clamas por
Amor!
¿Qué le
dices? Te estoy oyendo ahora.“¡Dios mío, ¡me has abandonado! ¿Por qué me has
dejado justamente en este momento? ¿Dios mío, por qué no estás aquí, ahora… que
es cuando más te necesitaba? ¿Por qué no tengo una señal tuya? ¿Por qué no me
has mandado un recado? ¿Qué pasa? ¿Dónde están las usuales sincronicidades que
no consigo ver ahora?”.Humano, ¿por qué crees que pasa esto? Porque tu Ser -
que además de materia humana también está compuesto de tu ser angelical - ¡está
necesitando Amor! ¿Y a quién se lo estás pidiendo? ¡Ah! Se lo estás pidiendo a
aquella parte de ti que tú consideras especial y superior, a aquella parte de
ti que has endiosado.
¡Clamas por
ser reconocido, por ser perdonado, por ser bendecido y por ser amado!
Y ahora yo
te pregunto, mi querido: ¿por qué no a la inversa? ¿Por qué tú no te diriges a
ese Ser Especial que tienes en tan alta estima y por esta vez siquiera le das
todo lo que él siempre suele darte sin juicio ni recriminaciones y sin pedirte
nada a cambio? Así es: a cambio de nada, Él siempre está a tu lado otorgándote
su gran Amor Incondicional.Entonces, en vez de pedirle algo, ¿por qué no le das
lo que posees? Podrías comenzar un diálogo con ese Ser Superior, con esa otra
parte de ti y quizás decirle algo así como lo que sigue:
“¡Oh, Mi
querido Ser Superior! ¡Oh, Gran Parte de Mí! Tú, que planificas, administras y
gerencias el gran concierto de todo aquello que somos nosotros en la
multi-dimensionalidad… Yo, desde nuestra porción humana, te reconozco, te
bendigo y canalizo hacia ti todo mi amoroso agradecimiento por el hecho de que
estemos juntos en esta experiencia, por el hecho de que estamos indisolublemente
unidos, por el hecho de que yo sin ti y tú sin mí… nunca habríamos originado
esta maravillosa experiencia.”
¡Discúlpame,
Oh querido Ser Superior, si en mi dualidad humana no te pueda ver y quizás
hasta no te perciba! Muchos dicen que te sienten, te perciben y hasta te pueden
ver… y yo, como el ser humano que ahora soy, a veces me siento algo disminuido
por no poder lograrlo. Quizás hasta me sienta algo loco por tener este diálogo…
Pareciera que estuviera hablando conmigo mismo, pero yo sé que no estoy
hablando conmigo. Aunque diga que lo estoy haciendo, yo sé que estoy hablando
contigo. Y aunque tú no me respondas verbalmente, yo sé que tú me estás oyendo.
¡Oh, querido ser Superior, quiero me oigas. Hoy, no acudí a ti para pedirte. Yo
deseo darte ahora lo que tengo y lo que soy… En vez de pedirte algo, te estoy
dando todo mi Amor Incondicional. No necesito nada a cambio porque yo ya lo
tengo todo… tú me lo das todo… ¡qué más puedo necesitar, si te tengo a ti!”¡Ah,
mi querido ser humano! ¡Qué diálogo! ¡Qué paradigma! En vez de pedirle al
Espíritu, le estas dando. ¿Ves cómo es correcto y apropiado? Ahora el mensaje
es de dos vías. Tú necesitas y pides… pero también posees y entregas. Ahora sí
que hay más equilibrio en esta relación… más no porque sea absolutamente
necesario, sino porque es conveniente y adecuado. Y así, ser humano, cuando
aprendes a dar, el aprendizaje se convierte en un hábito y ya no tienes que
aprender aquello que ya sabes hacer. Por consiguiente, ya Eres y no tienes que
pretender Ser. ¡Eres!
No hay comentarios:
Publicar un comentario