El caballo proporcionó a los anditas en dispersión la ventaja hasta ese momento inexistente de la movilidad,permitiendo a los últimos grupos de caballeros anditas progresar rápidamente por alrededor del Mar Caspio hasta dominar a toda Europa. Todas las olas anteriores de anditas se habían desplazado tan lentamente que tendían a desintegrarse a medida que se iban alejando de la Mesopotamia. Pero estas olas posteriores se desplazaron tan rápidamente que pudieron llegar a Europa en grupos cohesivos, que aún mantenían cierta medida de cultura superior.
La totalidad del mundo habitado, fuera de China y de la región del Eufrates, había hecho muy poco progreso cultural durante diez mil años, cuando hicieron su aparición los jinetes vigorosos anditas en el sexto y séptimo milenio antes de Cristo. A medida que se iban desplazando hacia el oeste a través de las planicies rusas, absorbiendo lo mejor del hombre azul y exterminando lo peor, se fueron mezclando hasta producir un solo pueblo. Éstos fueron los antepasados de las así llamadas razas nórdicas, los precursores de los pueblos escandinavos, alemán y anglosajón.
No pasó mucho tiempo antes de que las cepas azules superiores fueran totalmente absorbidas por los anditas en toda Europa septentrional. Sólo en Laponia (y hasta cierto grado en Bretaña) mantuvieron los andonitas más antiguos una lejana semblanza de identidad.
Tomado del Libro de Urantia
No hay comentarios:
Publicar un comentario