jueves, 5 de septiembre de 2013

La Invasión Aria en la India

La segunda penetración andita a la India fue la invasión aria durante un período de casi quinientos años a mediados del tercer milenio a. de J.C. La migración marcó el éxodo final de los anditas de sus tierras natales del Turquestán.Los primeros centros arios estaban esparcidos en la mitad septentrional de la India, particularmente en el noroeste. Estos invasores no llegaron a completar la conquista del país, y posteriormente fueron destruidos como consecuencia de ello debido a su número inferior, lo que los volvió vulnerables a la absorción de los dravidianos del sur, quienes posteriormente invadieron la entera península con excepción de las provincias del Himalaya.Los arios dejaron una escasa marca racial en la India, excepto en las provincias del norte. En el Dekán, su influencia fue más cultural y religiosa que racial. La mayor persistencia de la llamada sangre aria en el norte de la India se debe no sólo a su presencia en mayor número en estas regiones sino al hecho de que esa presencia fue reforzada por conquistadores, mercaderes y misioneros más recientes. Hasta el primer siglo a. de J.C. hubo una continua infiltración de sangre aria en la región del Pendjab, siendo el último influjo en forma de las campañas de los pueblos helénicos.En las llanuras del Ganges, a la larga, los arios y los dravidianos se mezclaron produciendo una cultura elevada, y este centro fue reforzado posteriormente por contribuciones del noreste provenientes de la China. Muchos tipos de organizaciones sociales florecieron esporádicamente en la India desde los sistemas semidemocráticos de los arios hasta formas de gobierno despóticas y monárquicas. Pero la característica más notable de la sociedad fue la persistencia de las grandes castas sociales que fueron instituidas por los arios en un empeño por perpetuar la identidad racial. Este complicado sistema de castas ha sido preservado desde entonces casi hasta el tiempo presente.      L.U.

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